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La mirada táctica de Marco: la defensa de Vic Fangio

Los Philadelphia Eagles comienzan el domingo una nueva andadura en playoffs, la séptima en las últimas ocho temporadas, que esperan que les conduzca hacia el Super Bowl LIX a disputar en New Orleans el próximo 9 de febrero. Las esperanzas del equipo de Pennsylvania residen en gran parte en su corredor estrella, Saquon Barkley, de quien ya hablamos por aquí durante el año; sin embargo, la defensa puede ser tan responsable o más de que el equipo de la ciudad del amor fraternal conquiste el segundo Trofeo Vince Lombardi de su historia.

El coordinador defensivo Vic Fangio fue contratado el pasado mes de enero de 2024 para paliar todos los males que afectaron a la unidad en el tramo final de la campaña anterior. Los Eagles parecían encaminados a repetir presencia en la gran final hasta que la defensa de Sean Desai se cayó por completo en el mes de diciembre. Después de haber sido un grupo Top 10 en casi todos los parámetros en 2022, Philadelphia descendió estrepitosamente hasta el puesto 30 en puntos encajados apenas un año más tarde. Esta temporada, con el veterano Fangio a los mandos, los Eagles han sido el segundo equipo que menos puntos y el que menos yardas ha concedido de toda la NFL. Veamos qué hace de la defensa de Fangio una tan poderosa.

El experimentado entrenador de 66 años ha tenido éxito en casi todas sus paradas desde que llegara a la liga en 1986 y solo la abandonara un año para estar con Jim Harbaugh en Stanford en 2010. Sus trabajos en Carolina Panthers, San Francisco 49ers o Chicago Bears son muy bien recordados. Sin embargo, cuando Denver Broncos apostó por él para ser su head coach en 2019 no logró encontrar la marcha correcta para arrancar ese proyecto. De vuelta a los rangos de coordinador, su campaña con Miami Dolphins en 2023 tampoco fue todo lo buena que él habría deseado, varios de sus jugadores veteranos no llegaron a comprar y creer en su esquema, algo que sí han hecho los jugadores de Philadelphia. Para Fangio ha sido una bendición, Pennsylvania es su estado natal y donde reside su familia.

El sello de la defensa Fangio es un esquema predominantemente nickel (4-2-5), con dos linebackers emparejados en el interior que realizan múltiples facetas, y una pareja de safeties bien establecida en la retaguardia de la unidad. Los Eagles han mostrado ese "look" de dos safeties profundos en el 71.7% de sus snaps este año, la tercera mayor de la NFL. Su cobertura predilecta es la Cover-4, una estrategia que protege al equipo contra los pases largos del rival, pero que a la vez es sólida contra la carrera por el buen hacer de los linebackers y por la tendencia de los safeties a no retroceder apenas al snap. De esa forma están siempre en buena posición para cubrir el pase o bien apoyar contra la carrera.

Philadelphia Eagles' Vic Fangio walks to the field before an NFL football game, Sunday, Dec. 29, 2024, in Philadelphia. (AP Photo/Matt Slocum)

No obstante, Fangio ha evolucionado su esquema estos últimos años para batallar contra los coordinadores que han ido realizando ajustes contra él. Aunque mantiene ese posicionamiento inicial de los dos safeties en profundo, eso no significa que post-snap se queden ahí. De hecho, solo en el 40.7% de las jugadas ha conservado los dos safeties atrás, la marca 17 en la competición. Esto es especialmente cierto en los downs tempraneros (primero y segundo), en los que Philadelphia solo ha jugado cobertura split-safety en el 38% de snaps, la sexta marca más baja de la liga. Eso ha permitido a los Eagles ajustar una defensa terrestre que encajó más de 300 yardas en los dos primeros compromisos ligueros, pero que luego se ha mostrado muy sólida el resto del año.

Además del característico personal nickel, del que hablaremos más tarde, la defensa de Fangio es una que se concentra en el rush de cuatro hombres de línea, algo que representan perfectamente estos Eagles. Su porcentaje de blitz es inferior al 20%, uno de los más bajos de la competición. Hasta en tres ocasiones este año Fangio completó un partido enviando solo una jugada con blitz o menos, algo que pasó más recientemente en su duelo ante Pittsburgh Steelers. Para que os hagáis una idea de lo raro que es esto, solo ha habido siete partidos en toda la temporada en los que una defensa realizó blitz en una jugada o menos, y ahí están incluidos los tres de Philadelphia.

Lógicamente, para ejecutar esa estrategia con éxito necesitas gente de mucha calidad y poderío físico en la línea. Los Eagles tienen a su gran estrella en Jalen Carter. El jugador de segundo año era el hombre más talentoso de su draft, pero problemas extradeportivos y dudas respecto a su carácter le hicieron caer hasta el pick 9 de Philadelphia en 2023. Su temporada de novato fue buena, pero inconsistente. En su segundo año, bajo la tutela de Fangio, ha elevado su juego de forma notable. Se ha convertido en esa pieza dominante que demanda dobles bloqueos del ataque rival, lo que libera en muchas ocasiones a sus compañeros para crear juego. El también defensive tackle, Milton Williams, es el principal benefactor de la atención que genera Carter. No obstante, el chico de Georgia es capaz de crear juego por sí solo, sus 45 presiones al quarterback rival han liderado al equipo. En muchas ocasiones bate a su par exhibiendo una fuerza física incomparable, sin embargo, también tiene buena técnica de manos. Su movimiento de "club & swim" es especialmente dominante y un auténtico quebradero de cabeza para los guards rivales. Su labor contra la carrera es igual de buena, lo que compensa el menor desempeño de Jordan Davis, otro chico de Georgia, del que los Eagles seguro esperaban más a estas alturas de su carrera.

Desde Sam Mills y Lamar Lathon en los Carolina Panthers, pasando por Patrick Willis y NaVorro Bowman en los San Francisco 49ers, o más recientemente Roquan Smith y Danny Trevathan en los Chicago Bears, Fangio siempre ha sacado el máximo rendimiento de sus linebackers. En su esquema, tan preponderante del personal nickel, es absolutamente esencial la labor de los dos hombres que patrullan por el medio de la defensa. En Philadelphia ha vuelto a conseguirlo, convirtiendo dos proyectos como Zack Baun y Nakobe Dean en un tándem de absoluta confianza. Dean, otro más de la escuela de Georgia, llegó con mucho pedigrí de college, pero en sus dos primeros años en la NFL la transición no fue sencilla y le costó bastante entrar en la alineación. Por su parte, Baun había sido en su etapa de New Orleans Saints un jugador exterior, centrado mayoritariamente en el pass-rush. Fangio ha cogido a estos dos jugadores y los ha puesto juntos a rendir a nivel de Pro Bowl. Son muy sólidos al placaje, efectivos en las situaciones que van al rush y siempre bien posicionados en las coberturas zonales que juegan en mayor porcentaje. Baun ha mostrado una gran movilidad lateral que le ha hecho incluso ganar más protagonismo que Dean en la defensa, pero en definitiva, ambos son como pareja lo que siempre ha buscado Fangio de sus linebackers, ser el ancla perfecta que permita al barco mantenerse estable en todo momento.

Vamos a la secundaria, donde también hay cosas interesantes que contar. Después del complicado inicio de 2-2, Vic Fangio aprovechó el tempranero "bye" del equipo para evaluar los puntos fuertes y débiles de su defensa, y realizar los ajustes necesarios. Uno de ellos se refiere a la agresividad que ha instalado en sus jóvenes defensive backs. Desde la semana 5 los cornerbacks de Philadelphia han formado en "press" (en la cara de los wide receivers) en el 22.1% de los snaps, un claro contraste con el 8.7% que registraron hasta entonces (la segunda marca más baja en la NFL). El novato Quinyon Mitchell apenas jugó en "press" en college, pero mostró unos atributos físicos que le hacían un candidato ideal para jugar así en los profesionales y está demostrando que la transición era efectivamente factible. Otro novato que está actuando de forma diferente a lo que vimos de él en la universidad es Cooper DeJean. El chico de Iowa jugó allí casi exclusivamente de cornerback exterior, pero en los Eagles ha sido lo contrario. Ha acumulado 550 snaps en el slot, por tan solo siete en el exterior y uno como safety. DeJean cayó a la segunda ronda del draft por su rigidez de caderas, probablemente más de un equipo le descartó como cornerback puro. Sin embargo, Philadelphia escogió en primera ronda a su cornerback exterior en Mitchell, por lo que se dio el lujo de seleccionar a DeJean en segunda y colocarlo en el puesto donde más relucen sus virtudes y menos sus defectos.

DeJean es un gran lector de jugadas y un chico muy físico en el punto del "catch" y a la hora de placar. Su tackleada sobre Derrick Henry fue uno de sus "highlights" del año. Los Eagles han mejorado su rendimiento exponencialmente tras el bye coincidiendo con la entrada del rookie en la alineación titular. Así, Fangio ha podido emplear su personal favorito nickel en el 80% de snaps, la tercera marca más alta en toda la liga. DeJean ha estado presente en ese personal nickel en más del 90% de sus acciones este año. Os pongo un ejemplo de su buen entendimiento del juego sacado del duelo ante Cincinnati Bengals de la semana 8. Cincinnati juega un concepto "dagger" (ruta vertical del receptor interior + ruta interior "dig" del receptor exterior) en amarillo para atacar el centro de la defensa y además manda a Ja´Marr Chase (en rojo) en una "shallow cross", ruta que podría generar más espacio todavía para el concepto explicado.

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Los Eagles por su parte van a formar en una Cover-3 Cloud, en la que uno de los cornerbacks y los dos safeties se reparten un tercio del campo en profundo. En el segundo nivel encontramos los cuatro defensores de la zona media: el otro cornerback, los dos inside linebackers y el slot corner (DeJean).

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El safety del lado débil (en azul) salta a la ruta cruzada de Chase, mientras que el otro safety (en verde) está obligado a caer con la ruta vertical, creando un espacio natural para la ruta "dig" (en amarillo), que tiene el "leverage" del cornerback en su favor. Burrow lee todo esto muy bien y se prepara para armar el brazo, pero la clave es la acción de DeJean (en rojo), quien va a reconocer las intenciones del quarterback para caer más allá de su zona natural de cobertura y apoyar así a su compañero. Fijaros cómo, mientras retrocede, echa un vistazo rápido a lo que se cuece por detrás suya.

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En el vídeo podéis observar lo bien que DeJean pasa de su asignación original y casi logra la intercepción de no ser porque su compañero Zack Baun también hace una gran jugada y desvía ligeramente la pelota.

Ni siquiera hemos entrado a hablar del pass-rush exterior o de las habilidades de los dos safeties, Reed Blankenship y C.J. Gardner-Johnson (diez intercepciones entre ambos), pero con esto ya nos hacemos una idea clara de lo bien que Vic Fangio tiene jugando a la defensa de Philadelphia. Los Eagles son uno de los claros aspirantes al título y su unidad defensiva es clara responsable de ello. El domingo ante Green Bay Packers viene su primer test de playoffs, no se lo pierdan.