Pasada la semana 2 la tentaciĂłn de extraer conclusiones es latente en cualquier aficionado. Para bien y para mal, esa acciĂłn tentadora es un calmante para el fan, desde el mĂĄs moderado al mĂĄs exaltado. AsĂ que no va a ser esta columna la que desdeñe esa labor social de apaciguar ĂĄnimos con mentiras sin receta. AĂșn y todo, sin querer entrar en falsedades ni hipocresĂas, en este NFL Salvaje me he propuesto soltar verdades como puños, "mis verdades", o ÂżquĂ© se piensa el lector? Âżacaso es misiĂłn de Mundo NFL y este humilde escritor calmar aguas mĂĄs allĂĄ de mis dominios? Aun no naciĂł el paria que modifique mi forma de pensar con "quejĂos" que pretendan una redenciĂłn literaria y amanse las letras de las que, de aquĂ en adelante, solo yo serĂ© el responsable. Como decĂa aquel: no se enfade, nadie muere.

Verdad 1: Los Packers
Que el equipo de la franquicia de Wisconsin estĂ© siendo la que estĂĄ desplegando el juego mĂĄs gratificante de ver, es una verdad infranqueable, ofensivamente es capaz de atacar todos los niveles de la defensa rival, sea vertical y horizontalmente, pero lo que es aĂșn mejor, dominando el relato en cada enfrentamiento con aquel recurso por el que, si algĂșn momento bueno del rival hace torcer el morro a la superioridad quesera, Hafley liberarĂĄ a Parsons, asomando el casco del #1 de los de Green Bay, el juguete reciĂ©n adquirido por LaFleur. Porque eso, quieran o no, condiciona a cualquier ofensiva.
Y todo es brillante por Green Bay, no hay nada que funcione mal, nada, cualquier unidad responde, entonces, ÂżquĂ© puede ser su mayor temor o amenaza? El Ășnico que puede serlo es el tiempo. Como el tempus fugit de Virgilio, nadie puede atrapar el momento, ni congelarlo, ni anticiparlo para que, en este caso, el Lombardi se entregue en Septiembre; el tiempo escapa y sucede imparable para que sucedan lesiones que perturbe ese ĂĄnimo de euforia y positivismo; tiempo para que el rival pueda estudiar el mejor momento de la franquicia sabiendo los movimientos desplegados en su esplendor; tiempo para que otros rivales mejoren motivados en ese standard fijado por los de Green Bay, y sobre todo, saber que, si el nivel de mĂĄxima excelencia es el 100 y la Franquicia quesera estĂĄ en el 90, muy prĂłximo a la perfecciĂłn, poco tramo hay para mejorar, pero mucho para empeorar. Por todo esto, como han hecho franquicias a lo largo de la historia, la labor de LaFleur no serĂĄ dejar que tal cosa suceda, sino dar una vuelta de tuerca, no necesariamente para que mejore o suba el nivel del 90 al 95, sino para que ese 90 que iba por la derecha, vire ahora para la izquierda sosteniendo la excelencia. EntiĂ©ndame el lector, cambiar de vĂa para desorientar a los perseguidores, siguiendo al mismo nivel competitivo, o lo que es lo mismo, conseguir que el playbook aun no empleado, sea igual de efectivo que el actual pero rotando engranajes que impidan la previsibilidad o cuando menos dificulte el estudio por el oponente en el momento mĂĄs crĂtico de la temporada, el 'win or go home'; porque la NFL es larga, inflexible y no hace prisioneros, va dejando cadĂĄveres a su paso en forma de 'season ending injury', y eso lo saben los vecinos divisionales que en años pretĂ©ritos comenzaron abrumando y terminaron con el talento en un MRI y mesa de operaciones.

Verdad 2: Los Bengals, Joe Burrow y la protecciĂłn
MĂĄs allĂĄ de la sensibilidad que cada aficionado tenga con el quarterback de su Franquicia, hay que decir ciertas cosas. El dolor de la lesiĂłn de Burrow el otro dĂa ante los Jaguars, podrĂa agravarse si, como decĂa Scott Kacsmar, Jake Browning termina la temporada saludable, o el tiempo que tenga que estar jugando, pudiendo llegar a mĂĄs de 20 partidos sin problemas de salud con la misma OL que protegĂa a Joe Burrow. Las dudas se irĂan a comprobar si JoeyB es 'injury prone'. Pero tambiĂ©n habrĂa que ser autocrĂtico en cuestiones con el empleo de diferente secciĂłn del Playbook para el bueno de Jake; la situaciĂłn podrĂa ser esta: Zac Taylor llamando a Pitcher y diciendo, mientras se moja el pulgar en la lengua para remover las pĂĄginas del libro de jugadas: 'tĂrame las hojas 77 a 123'. Mientras esto se da, Higgins y Chase seguirĂĄn haciendo yardas. Si aquello que mencionaba Kacsmar se produce, el debate con la OL llegarĂa a extremos olvidados de Seattle con Wilson, para bien, o de Colts con Luck, para mal. Pero al final siempre podremos decir, Burrow es como es y asĂ hay que aceptarlo, te da mucho y te quitaâŠÂżmucho? cuando no puedes hacer uso de una de las piezas que hacen grande la NFL de hoy en dĂa, no sabemos cuantificar su ausencia, aunque serĂĄ llorada. No sĂ© ni siquiera si este problema de la prolongaciĂłn de jugadas que Burrow intenta partido tras partido, estirando a su vez, la angustia, se solucionarĂa con una buena OL. Cualquier LĂnea Ofensiva, por buena que esta sea, en no pocos momentos por partido, es superada y si el mariscal de turno no suelta el balĂłn extendiendo la jugada mĂĄs allĂĄ del riesgo normal que el conocimiento y percepciĂłn del riesgo, aconsejarĂa, esto provocarĂa el mismo resultado. Debe haber una percepciĂłn del momento y una actuaciĂłn en consecuencia, y ahĂ, en la soberbia y sobrevaloraciĂłn de las propias capacidades elusivas por el QB, empieza el problema, y es entonces en ese hito temporal, cuando toda soluciĂłn debe ser puesta.

Verdad 3: Bears, el problema no era Trubisky ni Fields.
Con Chicago, una franquicia histĂłrica, de las mĂĄs grandes y antiguas de la NFL, suceden cosas difĂciles de atajar y entender. Un equipo que lleva penando las Ășltimas 6 temporadas, con el Ășltimo rĂ©cord positivo en 2018. A partir de entonces fueron temporadas de 8-8; 8-8; 6-11; 3-14; 7-10; 5-12; y en la actual 0-2. Draftearon en el 2017 a Mitchell Trubisky y en 2021 a Justin Fields, ninguno saliĂł bien, y cambiaron de General Manager, de Ryan Pace que seleccionĂł a ambos mariscales a Ryan Poles, que seleccionĂł a Caleb Williams con Matt Eberflus a los mandos. Como la cosa tampoco saliĂł, un 5-12 parecĂa poner la Ășltima punta en el ataĂșd de Poles, una sorprendente decisiĂłn de los Halas, lo mantiene en el cargo para la GestiĂłn Deportiva y ponen en la direcciĂłn tĂ©cnica al entrenador mĂĄs deseado del Ășltimo año que demostrĂł su Ă©xito ofensivo con Detroit Lions en las 3 temporadas pasadas, Ben Johnson. Ăste se encargarĂa de elaborar un playbook que ya funcionĂł en otra franquicia, que no es complejo en su ejecuciĂłn por el QB en tanto lo que pretende es la separaciĂłn por diseño de rutas, no dependiendo de la habilidad de sus receptores, y dando, mediante mucho bloqueo zonal, la viabilidad el pase y en zonas cercanas sin pretender llegar a menudo a zona profunda de una coz. Cambia la OL interior con dos veteranos como Thuney y J.Jackson. Su primer partido, contra Vikings, las rutas funcionaron, hubo separaciĂłn de receptores, pero fallaron otras muchas cosas, incluyendo la gestiĂłn del tiempo, la disciplina de la OL que cometiĂł muchas faltas, resultando un total de 12 penalizaciones para 127 yardas de pĂ©rdida. Demasiado. Pero tambiĂ©n hubo 7 terceros downs y fuera consecutivos por parte de Caleb en medio del partido, con separaciĂłn en ruta, como dijimos, y sin poder acertar con overthrows exagerados y faltos de precisiĂłn. Peor aĂșn la intercepciĂłn que provoca en el Ford field. Resulta difĂcil averiguar sus movimientos en el pocket, en USC no tuvo constricciĂłn ninguna y aquel backfield parecĂa el campo de la fiesta preparado para el baile de Williams con un libertinaje inusitado. DifĂcil contener al LeĂłn asilvestrado en un gridiron y bajo un gurĂș de Xs y Os que quiere tener cada esquirla de sus jugadas bajo total y absoluto control. Que requiere timing, anticipaciĂłn y precisiĂłn en el pase. No sĂ© si la libertad que demanda la naturaleza de QBs como Caleb es encajable en el sistema de Ben Johnson, porque a la postre, acaba por perjudicar a la OL cuyo arco de protecciĂłn no es infinito, y en cualquier caso al equipo. Y lo peor serĂa que fuera un Quarterback poco preciso en el pase, en cuyo caso, definitivamente, no valdrĂa en ese sistema que pretende un control del juego basado en pases a la hook, flat y justo a la espalda de los Linebackers, y sobre todo con unos drives que llevan 12-14 jugadas para llegar a la End zone. Esto parece inllevable. AĂșn es pronto, pero muero por ver la soluciĂłn que pone el otrora Coordinador Ofensivo en la Motown para que todo encaje. No es fĂĄcil, nadie duda del talento demostrado por Caleb en College Football, pero al final, los problemas en la posiciĂłn se repiten. Un dato final: Con el exQB de USC, los Chicago Bears son el equipo con mĂĄs punts en la liga. Las verdades absolutas no existen, pero es un dato que al menos, admite reflexiĂłn en Lake Forest.
Verdad 4: QBs no queridos
La NFL estĂĄ plagada de cenicientas en su historia, pero tambiĂ©n hoy lo sigue estando. Por ello desprecio juicios apriorĂsticos de apenas 2 años. Quarterbacks en su dĂa vilipendiados, son hoy starters valiosos en sus franquicias. SĂ, esos que llaman 'de sistema'. Quien nos diera esa tranquilidad en el pocket a casi todos; los elegidos son un puñado, y el resto debe funcionar. Desde Goff canjeado por McVay, Darnold saliendo de Jets, Panthers, 49ers y terminando una temporada 2024 con un rĂ©cord 14-3, Flacco a pesar del resto de QBs en Cleveland, Purdy desechado en 6 rondas por el resto de franquicias, Geno Smith en Raiders, Fields en Jets y sobre el que harĂ© una menciĂłn especial, Baker Mayfield. Probablemente el quarterback que mĂĄs haya mejorado desde su inicio, despuĂ©s de pasar por Browns, Panthers, Rams y ahora en el mejor entorno posible, Tampa. Su juego de play action, una OL que entiende sus movimientos, su backfield en protecciĂłn para shotgun, y sobre todo, los skill players a su lado. Con una estatura limitada, obligado a un slide o shuffle lateral, las mĂĄs de las veces, para encontrar visiĂłn, ha ganado una precisiĂłn y anticipaciĂłn en las rutas que no admite discusiĂłn. La victoria contra Houston ha sido una lucha contra las adversidades debiendo remodelar la OL con el cambio de Barton de Center a Left Tackle y metiendo al Guard, Bredeson, en aquella posiciĂłn, pero sobre todo, se convirtiĂł el choque en una lucha por gestionar el partido que completĂł maravillosamente, minimizando errores, no regalando nada al rival y completando aquello que debĂa. Sabemos de su mejora en la precisiĂłn, pero gestionar los finales de partido, ya es algo que empieza a ser habitual para el bueno de Baker que, como el vino y lienzos antiguos, mejora con el tiempo.
Verdad 5: Chargers
Estos Chargers de Harbaugh se van pareciendo, cada vez mĂĄs, al equipo que pretende su HC. Cada cosa requiere su tiempo, y el entrenador angelino, vio que, por las trincheras, como hizo en Michigan, se empieza cualquier proyecto, y da igual que falte alguna pieza, como Slater, para toda la temporada, funciona como un reloj a favor de uno de los mayores talentos de la liga, Justin Herbert. A Harbaugh le gusta correr, siempre le ha gustado, pero es imposible prescindir del protagonismo en la ofensiva de tu Quarterback cuando sabes que es uno de los elegidos por la varita del talento indescifrable. Es el tĂpico caso del sacrificio de las ideas propias por la realidad mĂĄs abrumadora. Mi pregunta aquĂ serĂa: Âż Puede Ben Johnson en Bears adaptarse al talento de Caleb o debe ser Caleb el que se adapte a un libro que funcionĂł en otra franquicia?
Chargers debe ir a por el dominio de la divisiĂłn, tiene entrenador, trincheras, jugadores y parece que solo un rival, pero el gran rival, de la divisiĂłn, de la AFC y de la NFL: KCC.
Verdad 6: Chiefs
Desde 2014 con Andy Reid y Alex Smith a los mandos, la franquicia de Arrowhead no comenzaba 0-2. Ya empiezan a llover rumores de su caĂda y no entrada en playoffs. Yo, permĂtanme, no voy a caer en eso. A muchos se lee y escucha: " no por tener a Mahomes debe respetarse su favoritismo". Y es cierto, no por tener a Mahomes, pero si algo me ha enseñado las mĂĄs de 3 dĂ©cadas viendo este deporte, es el respeto a los que han demostrado en tiempo duradero, que saben ganar y hacer las cosas, en romĂĄn paladino, el respeto en los peores momentos se gana y KC lo han hecho. Que se han vuelto mĂĄs predecibles, puede ser, pero que el reto es otra vuelta de tuerca que debe ejecutar Reid, como otrora hicieron los Patriots de Belichick, es algo que espero con ansias, especialmente cuando recupere a sus 2 receptores titulares, el WR1 y WR2, Rice y Worthy. QuĂtenles a su franquicia o a cualquiera, sus dos mejores receptores. Mahomes no puede hacer mĂĄs, de momento. Con un Kelce en clara recesiĂłn, sin armas ofensivas por aire, con una carrera inane, y una OL donde solo un magnĂfico Simmons da esperanzas de algo mejor, la fe es el rojo al que Patrick apuesta todo. No serĂ© yo quien los tumbe, que sea Harbaugh y la competiciĂłn que resulte. En esta NFL salvaje todo puede pasar.
Verdad 7: Eagles
Philadelphia ha empezado este año ganando todo con lo justo. Es la goma que estirando un extremo, el otro se junta, cuando mĂĄs aprieta un equipo, mĂĄs se ajusta Eagles, y solo harĂĄ lo necesario para ganar. No va a derrochar ni una gota de sudor de mĂĄs. Si tiene que ganar con 100 yardas lo harĂĄ sin sumar una mĂĄs. Para ello tiene en el campo al mejor gestor de finales con Mahomes, Jalen Hurts, que no regalarĂĄ un balĂłn ni una posesiĂłn, incluso contra un 7 men blitz dando aire al oval para favorecer la ruta como aquĂ:
El objetivo es ganar, no jugar bonito y con ello volveremos a la dicotomĂa de Jugar Bien Vs Jugar Bonito. Juega bien el que gana, juega bonito el que agrada a la vista. Eagles es lo inverso a packers en la victoria. Green Bay gana estando a un nivel muy elevado, Eagles lo hace con lo justo pero con mucho por mejorar aĂșn. Pensemos solo en lo infrautilizados que estĂĄn dos de los mejores receptores de la liga como AJ Brown y Devonta Smith.
Verdad 8: Cowboys y Giants
Probablemente el partido mas emocionante y divertido de la jornada, no por jugar bien, sino por ser un conglomerado de catastrĂłficas desdichas por ambos lados. New York con 14 penalizaciones para una pĂ©rdida de 160 yardas por Dallas con 12 penalizaciones para 106 yardas. Son equipos desordenados, cada uno por lo suyo. Giants y Daboll ya no dan para mĂĄs, empieza a ser una relaciĂłn dañina, no era el QB, no era la OL, es la forma de trabajar y hacer las cosas para mejorar y que dĂ© al aficionado un halo de esperanza real, porque ya son años con rĂ©cord negativo y siendo el HC uno de los culpables de la extensiĂłn de Daniel Jones que luego tuvieron que echar. En 2023 finaliza con 6-11, en 2024 con 3-14 y ahora van 0-2, un total de 9/27 en estos Ășltimos 3 años. Y probablemente mejore puntualmente y eso valdrĂĄ para algĂșn fan, para el optimismo en un futuro mejor, pero mucho me temo que ahĂ hay algo mĂĄs que cambiar. Falla el piloto y, lo peor, puede fallar la ruta.
En Cowboys todo empieza y termina en Jerry Jones, todo sale de una ausencia de Plan general constructivo que denote una preocupaciĂłn mĂnima por la deriva de la franquicia. Prescindir del mejor jugador defensivo de la liga por dos primeras rondas, en su prime, es algo que aun no se entiende en un mayoritario sector de Dallas. OjalĂĄ haya un plan que aun no vemos los mundanos aficionados, se adquiera un valor con ese capital de draft y la franquicia vuelva a donde le corresponde. Egos y desidia de los Jones, limitan en demasĂa los brazos de Schottenheimer y compañĂa, harĂĄn lo que puedan con lo que tienen, con lo que les dan⊠y con lo que les quitan.
Tengan salud y una gran semana 3.





